El grupo municipal de los Comuns ha pedido al Ayuntamiento de Barcelona que paralice el proyecto urbanístico para instalar el nuevo Museo Thyssen en el antiguo Cine Comedia, en el cruce de paseo de Gràcia con Gran Via. La formación llevará a la comisión de Ecología y Urbanismo una proposición para que el Gobierno de Jaume Collboni frene los trámites y replantee la operación, al considerar que supone un fuerte incremento de edificabilidad, usos comerciales añadidos y un impacto urbano y ambiental significativo en uno de los puntos más sensibles de la ciudad.
Los Comuns recuerdan que, igual que ERC, ya se opusieron a la modificación del Plan General Metropolitano que hace posible el proyecto y que fue aprobada con los votos de PSC, Junts, PP y Vox. La sede del Museo Thyssen en Barcelona es una iniciativa del fondo de inversión Stoneweg, el mismo que impulsó el fallido Hermitage, y se apoya en un planeamiento que permite pasar de unos 6.000 a 11.000 m² edificables, con dos nuevos volúmenes de seis y nueve plantas sobre el Palau Marcet. Para los críticos, esta ampliación altera la fisonomía del cruce y consolida más intensidad de usos donde ya hay una fuerte presión urbana y turística.
El Col·legi d’Arquitectes de Catalunya ha pedido al alcalde suspender la tramitación urbanística y abrir un proceso participativo con concurso de ideas, al advertir del “incremento volumétrico muy relevante” y de la consolidación de actividades comerciales en un solar históricamente destinado a equipamientos. Urbanistas y entidades vecinales cuestionan que más de 2.500 m² se destinen a tiendas y restauración dentro del museo y reclaman estudios específicos sobre el retorno urbano, el impacto ambiental, el consumo energético y la movilidad generada por el nuevo equipamiento en una zona de alta presión turística.
En su proposición, los Comuns sostienen que el plan no ha contado con una participación “estructurada” sobre la oportunidad, el alcance y las alternativas del proyecto, pese a su impacto patrimonial y ambiental. La formación plantea que el Ayuntamiento detenga el expediente y promueva un proceso de debate público que evalúe otras opciones arquitectónicas y urbanísticas para el antiguo Cine Comedia.
