Ernest Urtasun inaugura en el Museo Arqueológico Nacional la exposición ‘La mitad del mundo. La mujer en el México indígena’ y reivindica un nuevo marco de relaciones con México: “No debemos tener miedo a palabras como diálogo o perdón”.
El ministro de Cultura, Ernest Urtasun, ha inaugurado este martes en el Museo Arqueológico Nacional (MAN) de Madrid la exposición ‘La mitad del mundo. La mujer en el México indígena’, una gran muestra dedicada a las mujeres de los pueblos originarios que se podrá visitar hasta marzo de 2026 en cuatro sedes madrileñas. En su intervención, Urtasun ha reclamado “no tener miedo a palabras que nos aproximan, como diálogo o perdón”, en alusión al pasado colonial y a la necesidad de un reconocimiento explícito del sufrimiento infligido a las comunidades indígenas.
La exposición, organizada por el Ministerio de Cultura español y las autoridades culturales mexicanas, reúne más de 400 piezas de arte prehispánico y contemporáneo que retratan la dimensión doméstica, política, ritual y simbólica de las mujeres indígenas. Esculturas, cerámicas, códices, textiles y objetos rituales permiten seguir su presencia desde la vida cotidiana hasta el ejercicio del poder, con obras procedentes de colecciones distribuidas por todo México. El proyecto se articula en varios núcleos, entre ellos ‘El ámbito divino’, alojado en la Casa de México, donde se exploran las figuras femeninas asociadas al agua, la noche y otros elementos sagrados.
Urtasun ha enmarcado la muestra en una agenda más amplia de revisión crítica de los discursos museísticos y de apoyo a las creadoras y comunidades históricamente invisibilizadas. El ministro ha insistido en que este proyecto es “una oportunidad para escuchar las voces indígenas y reconocerlas como protagonistas de su propia historia”, y ha destacado el trabajo de las comisarias y de las instituciones mexicanas que han cedido fondos en un contexto marcado por el debate internacional sobre la restitución y la memoria colonial.
La inauguración supone también un nuevo gesto de acercamiento político y cultural entre España y México, tras años de tensiones diplomáticas en torno a las demandas de disculpas por la conquista. Tanto Urtasun como las autoridades mexicanas presentes han presentado la exposición como un símbolo de diálogo y reparación simbólica, en el que las mujeres indígenas ocupan el centro del relato. La muestra se completa con visitas guiadas, actividades educativas y programas públicos destinados a divulgar las luchas y aportaciones de estas mujeres en la preservación de la memoria, la lengua y el territorio.