La Generalitat de Cataluña ha anunciado el cierre inmediato de su oficina comercial en Tel Aviv, gestionada por la agencia ACCIÓ, en respuesta a la ofensiva militar israelí en Gaza. La decisión fue tomada tras una reunión entre el conseller de la Presidencia, Albert Dalmau, y la líder de los Comuns en el Parlament, Jèssica Albiach, y comunicada oficialmente antes del pleno parlamentario.
La demanda, impulsada desde hace tiempo por los Comuns y por la comunidad palestina en Catalunya, cobró fuerza a raíz del comienzo de la ofensiva israelí en Gaza. Albiach calificó de «genocidio» la situación que vive en Palestina por parte de Israel y exigió una respuesta colectiva internacional. Por su parte, el presidente de la Generalitat, Salvador Illa, afirmó que esta medida refleja la postura clara del ejecutivo catalán frente a la situación en la Franja de Gaza.
La decisión catalana se alinea con otras acciones internacionales, como la suspensión de negociaciones comerciales con Israel por parte del gobierno británico de Keir Starmer, quien expresó su horror ante la situación en Gaza. En España, la mayoría del Congreso respaldó ayer un embargo de armas a Israel, aunque sin el apoyo del PP y Vox.