El Sindicat d’Habitatge de Nou Barris logró el viernes pasado aplazar el desahucio de Raquel, una vecina del barrio de Verdum que sufre una discapacidad a raíz de haber sido víctima de violencia machista. El caso forma parte de una oleada de desahucios prevista en el distrito durante el mes de mayo, con seis lanzamientos programados en solo 21 días, y que ha llevado al colectivo a alertar de una “primavera caliente” en defensa del derecho a la vivienda.
Raquel había recibido promesas de realojo desde diversas instancias institucionales. Según el sindicato, se le había adjudicado una vivienda a través del programa Reallotgem de la Generalitat, aunque la administración ha terminado retirando la oferta alegando un error por no cumplir con los metros cuadrados mínimos exigidos. La afectada se enfrentaba a un nuevo desahucio impulsado por Anticipa, inmobiliaria propiedad del fondo buitre Blackstone, que ya acumula múltiples desahucios en el distrito y ha sido señalada en diversos casos de prácticas abusivas.
El Ayuntamiento de Barcelona ha explicado que el desahucio responde a un caso de ocupación y que conoce la situación desde hace un año. Asegura que Raquel está vinculada a los servicios municipales y que se han producido mediaciones con la propiedad, aunque hasta ahora no se ha ofrecido una solución de realojo definitiva. El consistorio ha señalado que el programa Reallotgem fue descartado por la Agencia de la Vivienda de Cataluña debido a que la vivienda asignada no cumplía los requisitos de superficie.
Este caso llega días después de que se aplazara otro desahucio, el de Juanjo, referente de la lucha por la vivienda en Ciutat Meridiana, previsto inicialmente para el 30 de abril y pospuesto hasta el 28 de mayo. Hasta el 21 de mayo están previstos al menos tres desahucios más en Nou Barris: dos en el barrio de Porta y uno en la Prosperitat. El sindicato ha convocado movilizaciones en los próximos días y reclama mayor implicación de las instituciones ante una situación que consideran insostenible.